Giro el mundo entre mis días,
mas de ciento ochenta días
Las mentiras de los demás se mezclan en mi relato. Mis actos no mienten,
mis palabras tampoco; o sí. Sin
embargo no nos cabe el pudor.
Camino,
respiro,
duermo,
como si mi vida siguiera, yo no
puedo, aunque digan ellos que debo.
Tus labios, dientes y lengua
cuando leías “Pasábamos la vida en un bar” robado,
mientras el guardia nos quería
expulsar para que no luquearamos en la Terminal.
“Si fuese hetero, te gozaría los
labios”, me dijiste acompañando mi beso.
Aún conservo ese recuerdo en mi
mente, en mi cuerpo excitado, de tus ojos negros,
de tus dientes al sonreír, tus
caderas y vos.. .que no estabas ahí; o sí
Me gustan tus labios , como se
abren a tu sonrisa.
Me gusta tu pelo
corto, ocultando
tus orejas.
Me gustan tus manos que intentan seguirme.
Me gusta tu nariz respingada, limitando tus besos.
Vos tan hermosa y yo, tan “coso”. Estas tan bonita
que yo me pierdo buscando tu mirada.
¿Como encontrarte? ¿cómo saber que sos vos y ninguna otra?
Siento este invierno queriendo olvidarte
Suenan acordes envolviendo mi vida en un baile . La birome es mi compañera, el papel
también.
La noche
comienza a desvelarse en esta ciudad oculta.
Ella también quiere bailar.
Si supieras mi cansancio cortarías los hilos: Si, a vos te
digo ¿cómo si no supieses?
Todos tenemos una marioneta
adentro. Por favor corta mis hilos.
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